¿En qué áreas se desempeñan los periodistas políticos en Colombia?
Silvia Olmedo, citando la obra de Antonio Pasquali, Comprendiendo la comunicación, afirma que "Pasquali recuerda la prevalencia de la dominación
de las ideas de cada época de acuerdo a las ideas de la clase dominante y que ha pautado de forma definitiva la importancia de las relaciones comunicaciones-poder. De esta tensión, es donde el discurso del poder y la identificación con la dimensión comunicacional ha motivado que la comunicación sea la nueva encarnación de la
autoridad, del poder político, científico y tecnológico" (Olmedo, 2011).
Es así como los periodistas políticos se emplean, en su mayoría, en los medios de comunicación, así como en los despachos de las instituciones políticas.
En conclusión un periodista político en Colombia puede optar por trabajar como periodista investigador de temas políticos, como editor del área de política, judicial o nación en medios impresos o audiovisuales, puede ser analista político de su propio medio, o asesor en comunicación estratégica para análisis de coyuntura política, columnista de opinión política. Ademas el comunicador político realiza múltiples funciones, que van desde la construcción de una campaña política con toda su estrategia de medios, hasta la proyección de la imagen de un político y el manejo de la opinión publica para que le sea favorable.
El comunicador político también hace análisis de conducta política y de opinión publica y se los remite a su jefe inmediato, ademas organiza las ruedas de prensa, elabora los comunicados de cara a la opinión publica, construye toda la estrategia de relaciones publicas de el gobernante para el que trabaja, e incluso puede llegar a hacer hobby en un momento dado.
Miguel Angel Barrantes, comunicador político.
En mi experiencia personal como comunicador político al servicio de la Fundación Primero Colombia, fundación del Ex Presidente Alvaro Uribe, puedo decir que lo mas gratificante de la comunicación política es el desafió intelectual que plantea, la batalla que se libra por la mente y los corazones de los votantes, y la guerra a muerte que vive con los contendores políticos y con la inventiva falaz de los medios.